Personalmente creo en la superación y dentro de mi historia de la cual les comentaré puedo decir que he superado cosas pequeñas y cosas grandes. Fui una víctima más de la violencia familiar, en todos sus sentidos. Mi historia me enseñó las situaciones por las que las mujeres que sufren violencia intrafamiliar atraviesan, conozco el sentimiento de soledad cuando crees que nadie te puede extender la mano, conozco la desesperanza porque muchas veces quise superarme; conozco el sentimiento de impotencia al ver a mi hijo esperando que supla sus necesidades mientras lo único que podía hacer era armarme de coraje y conseguir un techo y alimento para ambos o al menos para él. La labor de vida que ahora realizo lo llamo sueño porque realmente así pasó. Una vez soñé y vi un lugar donde podía ayudar a las mujeres, un lugar donde los niños podían aprender, donde las mujeres y jóvenes pudieran mejorar sus condiciones de vida, un lugar para ser mejores personas. Hoy Centro de Vida un sueño hecho realidad.
En Agosto de Septiembre de 2014, Erika Becerra, hoy fundadora y Presidente de esta asociación, comienza un grupo de superación personal de no más de siete personas en su casa. Este grupo comenzó a tener éxito y las mujeres se fueron sumando, hasta que Erika decide rentar un espacio más grande, ya que en su sala ya no cabían las más de 20 mujeres que asistían a las charlas de superación.
Con el apoyo de su hijo Javier comienzan a darle imagen e ideología a este grupo y el 09 de septiembre de 2014 se inaugura Centro de Vida.
Con el apoyo de personas que fueron apareciendo en el camino, la organización fue creciendo, se comenzaron impartir más clases y talleres. Los voluntarios aumentaron por la necesidad de atender a tantas personas que venían a recibir una clase o una asesoría.
El camino ha sido de escases de recursos económicos, pero no de recompensas para las mujeres. Ya que a lo largo de el tiempo que se ha sostenido esta Asociación. Los primeros dos años, el material para los talleres de belleza, artes, cocina, escaseaba, aún así, las mujeres no se rendían y continuaban capacitándose hasta ver su propia historia de éxito.
El día de hoy Centro de Vida A.C. cuenta con más de 700 beneficiarios (mujeres, niños y jóvenes) los cuales muestran su apoyo a centro de Vida por el agradecimiento y la oportunidad que encontraron en este lugar.
Brindar atención integral a las personas más vulnerables: apoyo psicológico, asesoría legal y asistencia médica; brindarles información y herramientas para su desarrollo laboral, por medio de cursos y talleres; además de su desarrollo personal con clubes de arte, cultura y platicas que hagan crecer su espiritualidad.
Ser la opción integral para la atención de la mujer victima de violencia. Posicionarse como la mejor opción para el desarrollo humano y capacitación para el trabajo.